Este zanjón se encuentra en el término municipal de Porto (provincia de
Zamora) unos dos kilómetros al sur de Peña Trevinca y a poco más de dos
kilómetros del embalse de Vega del Conde, en el paraje denominado Cabuerco Vedado
según el mapa 1:25000 del IGN. Sus coordenadas en datum ETRS89 son 29T
683280 4677250.
Se trata de una zanja excavada en el terreno de dirección aproximada
este-oeste y de 300 metros de longitud. Su anchura máxima es de 25 metros y en
algunos puntos puede sobrepasar los 15 metros de profundidad. Del centro de
esta zanja parte otra de dirección noreste-suroeste de 190 metros de longitud.
Por el fondo de ambas zanjas fluyen cursos de agua que drenan el valle de
origen glaciar situado aguas arriba. Las zanjas se sitúan justamente en el
final de un valle de origen glaciar colgado sobre el valle del río Tera (el
cual también posee origen glaciar).
Geológicamente el zanjón se encuentra excavado en la Formación neis
glandular Ollo de Sapo, que en esta zona constituye la base del Ordovícico
Inferior, datada en unos 485 millones de años. Se trata de un neis
caracterizado por la presencia de grandes cristales de feldespatos, así como
por la presencia de cristales de cuarzo azul.
Unas zanjas de estas características, aunque actualmente son utilizadas
por la red fluvial de la zona, no son de origen natural. No existen en los
valles cercanos zanjas similares originadas por la erosión fluvial. Por otro
lado, los pocos miles de años pasados desde la retirada de los hielos de la
última glaciación no han sido suficientes para que un curso de agua genere por
erosión una estructura de esta magnitud. Así mismo se trata de estructuras
demasiado rectas y de caja muy cuadrangular como para ser originadas por
erosión. Todo esto hace pensar que son estructuras mineras.
El tamaño de las zanjas excavadas nos hace pensar en la extracción de una
mena muy rentable, oro, no estaño que sería la otra posible mena extraída y que
es de menor rentabilidad por lo que no realizaban obras tan grandes para su
beneficio. El lugar, a 1650 metros de altitud, y alejado de todo núcleo de
población conocido, también nos induce a pensar en una minería muy rentable
para la época romana, la de oro.
Geológicamente la presencia de oro en este lugar se puede justificar si
lo que se explotaba eran diques de cuarzo en los cuales puede haber diseminado
oro, y los romanos lo sabían bien, explotando por la zona otras minas de estas
características en todo el noroeste de la península, y en particular en la zona
del Bierzo y de la Cabrera, a unos kilómetros al norte de este punto. La
presencia de un dique de cuarzo en esta zona no sería rara, ya que unos
kilómetros al oeste existe un granito porfídico biotítico que en sus últimas
fases de consolidación magmática podría haber generado estos diques. Por toda
la zona se observan otros diques y venas de cuarzo, algunos de tamaño
cartografiable. Algunas de estas venas podrían estar generadas por exudación,
pero algunos dique son claramente intrusivos, por lo cual posiblemente
mineralizados.
En la zona no se observan canales ni depósitos de agua que hubiesen dado
servicio a la explotación minera. Aguas arriba de la mina se encuentran las
lagunas de Piotorta, en el collado que separa este valle del nacimiento del río
Bibei. Estas lagunas pudieron suministrar agua a la explotación. Curiosamente
la laguna de mayor tamaño (coordenadas UTM 682415 4676570) nutre con sus aguas al río Bibei
(cuenca del Sil-Miño) y al río Tera (cuenca del Duero). Podría llegar a
pensarse, aunque no se puede demostrar, que el canal que drena esta laguna
hacia el este, hacia la cuenca del Tera, es de origen artificial para abastecer
de agua la mina, y que la laguna originalmente solo daba sus aguas al río
Bibei.
La ausencia de escombreras de la mina puede ser debido a que el material
debía ser molido muy fino para poder extraer el oro, por lo que la ganga era
fácilmente arrastrable por los arroyos que discurren por la explotación, máxime
cuando ha habido casi 2000 años para realizar este arrastre. Justamente aguas
abajo de la explotación existe una loma alargada sobre el fondo del valla del
río Tera que pudiese ser una escombrera. No puede serlo ya que sobre existe
sobre ella un bloque errático, una roca de gran tamaño movida por el glaciar,
por lo que la loma tiene bastantes más
miles de años que la posible mina.